El cambio se produce tras la Declaración de Londres de ISO, en la que la organización se compromete a luchar contra el cambio climático y contribuir a la agenda climática.
Para algunas normas, los riesgos del cambio climático pueden no ser lo primero que les venga a la mente. La intención de ISO no es forzar una conexión, sino garantizar que cada organización incluya el cambio climático como parte de su análisis contextual y, si lo considera pertinente, lo tenga en cuenta en el diseño y la aplicación del sistema de gestión.
Comprender el contexto de la organización y las necesidades y demandas de las partes interesadas ya es obligatorio y está recogido en el capítulo 4 de la estructura armonizada de la norma ISO. La única acción nueva requerida, como tal, es que el cambio climático como tema siempre debe ser considerado como parte de este análisis.
¿Qué normas?
La enmienda sobre cambio climático se aplica a todas las normas ISO de tipo A sobre sistemas de gestión, es decir, las que especifican requisitos y conforme a las cuales pueden certificarse las empresas. Esto incluye las siguientes normas: ISO 14001, ISO 15378, ISO 19443, ISO 21001, ISO 22000, ISO 22301, ISO 28000, ISO 29001, ISO 37001, ISO 45001, ISO 50001, ISO 9001, ISO/IEC 20000 e ISO/IEC 27001. (Vea la lista completa de normas en el Comunicado conjunto de IAF e ISO).
La relevancia inherente del cambio climático diferirá en gran medida para las distintas normas debido a sus diferentes ámbitos de aplicación y finalidad prevista. La pertinencia también dependerá de factores como la ubicación y la naturaleza de la organización, por ejemplo, el sector empresarial, el tipo de procesos, productos y servicios, etc.
¿Cuál es el requisito?
La enmienda se incluye en el Capítulo 4 de la Estructura Armonizada (Apéndice 2 del Anexo SL en las Directivas ISO/IEC Parte 1 Suplemento ISO Consolidado):
- 4.1 Entender la organización y su contexto donde se añade la siguiente frase: "La organización debe determinar si el cambio climático es un asunto relevante".
- 4.2 Comprender las necesidades y expectativas de las partes interesadas donde se añade la siguiente frase: "NOTA: Las partes interesadas pertinentes pueden tener requisitos relacionados con el cambio climático"
En resumen, el nuevo requisito estipula que las organizaciones deben determinar si el cambio climático es una cuestión relevante y si las partes interesadas pertinentes tienen requisitos relacionados con el cambio climático. Si se determina que es una cuestión relevante, el cambio climático debe tenerse en cuenta en el desarrollo e implantación del sistema de gestión. Si ya dispone de un sistema de gestión certificado conforme a una norma ISO, ya está realizando este tipo de análisis contextual. La única diferencia es que el cambio climático siempre debe ser un tema que se tenga en cuenta en su análisis y, si se considera relevante, debe formar parte de su sistema de gestión.
Los gases de efecto invernadero, el calentamiento global y el cambio climático llevan más de 30 años en la agenda de gobiernos, autoridades, empresas, ONG y la sociedad en general. Los efectos negativos de las emisiones son evidentes y la contribución de todos es esencial.
Muchas organizaciones ya han determinado cómo afecta el cambio climático a sus negocios. Para las que aún no lo han hecho, esta puede ser una oportunidad para empezar a evaluar los riesgos del cambio climático y equipar el sistema de gestión para ayudar a afrontar los retos.
Los auditores de DNV incluirán estos complementos en futuras actividades de auditoría cuando evalúen estas partes del sistema de gestión.